Hace ahora ya algo más de tres años, el Real Madrid de la mano de Mijatovic y Calderón fichó a un semidesconocido central procedente del Oporto por la friolera de 30 millones de euros. Ese jugador era Pepe, hoy reconocido como uno de los mejores centrales del continente, y que tardó poco en demostrar por qué su traspaso se cifró en una cantidad tan alta. Hasta el punto de que ‘el central de los 30 kilos’ pronto empezó a ser conocido como ‘Don José’. Y algo similar está sucediendo con otro jugador este año en el Real Madrid: Ángel Di María.
El argentino fue el fichaje más caro de los seis que se concretaron este pasado verano. Nada menos que veinticinco millones de euros más once en incentivos fue lo que el club merengue pactó con el Benfica. Pero hasta hace bien poco, Özil y Carvalho eran quizás los que más reconocimiento estaban recolectando. Hasta hace bien poco. Porque en los últimos partidos, ante Milan y Racing de Santander, es Ángel Di María el que está destacando por encima de los demás. Como prueba de su progreso, está el ranking Castrol. El jugador del Real Madrid ha ascendido unos 500 puestos en el ranking, desde el puesto 1916, al puesto 1441.
En el último partido de Liga mismamente, el argentino fue despedido por la afición merengue con una sentida ovación, e incluso el propio Mourinho no dudó en aplaudirle fervientemente. Un Mourinho que en el tercer gol se abrazó al extremo zurdo para celebrarlo, nada más y nada menos. No en vano, lo cierto es que El Fideo estuvo escandaloso en la goleada al cuadro cántabro, participando directamente en cuatro de los seis goles merengues.
En el primero del Madrid, la asistencia a Higuaín desde campo propio es de Di María. En el tercero, es Di María el que recupera el balón y asiste en profundidad a Özil para que éste le regale el gol a Ronaldo. En el cuarto, el que centra el balón hacia el área para que remate Cristiano es también Di María, que venía de robar el cuero en la línea del medio del campo. Y en el quinto tanto blanco, el Fideo es el que provoca el penalti que posteriormente transforma Ronaldo.
Tras el partido, el argentino dio las claves de su fulgurante progresión. “Cada vez estamos más compenetrados todos, y yo estoy cada vez con más confianza. Creo que se nota en el campo además” confesaba Di María, cuya explosión no es cuestión de un partido aislado. Y es que ante el Racing no fue el primer partido en el que destacó. Mismamente ante el Milan fue uno de los más eficientes, tanto en defensa como en ataque, y así lo reconoció el propio Mourinho públicamente. En la goleada al Deportivo de La Coruña, Di María fue el artífice de un tanto, y el asistente en otro. Y ante la Real Sociedad y el Auxerre fue decisivo con sendos goles. Así pues, no parece que la progresión del Fideo vaya a ser flor de un día, sino que más bien puede ser el heredero del legado de Pepe en el Madrid.
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